La importancia del servicio eléctrico como motor de la economía mexicana

El uso de electricidad está en todas las actividades que realizamos diariamente, es imposible imaginar una vida sin esta energía pues todas las actividades humanas actuales requieren de este servicio público básico.

Pensemos qué pasaría si una empresa se queda sin energía eléctrica por un día.

Por supuesto, merma completamente las actividades laborales y por ende económicas tanto de la organización como de sus aliados, proveedores y clientes.

Por esto, un servicio de electricidad eficiente es esencial para el desarrollo y funcionamiento de un país.

Si hay falta de cobertura y calidad en el servicio de energía eléctrica obstaculizará el desarrollo tecnológico.

A su vez, esto, significará bajas de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y ni la población, ni el país en general gozarán del bienestar del que se espera.

Por lo anterior, es que es menester modernizar y mantener en buen estado la infraestructura de la industria eléctrica.

Gracias a esto se pueden ofrecer mejores servicios a los usuarios y nivelar la competitividad mundial.

Servicio de electricidad a través del tiempo

  • En 1937, por decreto presidencial, nace la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
  • Para 1960, el Estado adquiere todas las empresas eléctricas del país y las consolida en CFE y Luz y Fuerza del Centro.
  • En 1992 se reforma la Ley de Servicio público de energía eléctrica.
    Aquí se establecen las ramas en las que el sector público, privado y social pueden participar dentro de la red eléctrica.
    Así que pueden intervenir en la producción independiente, cogeneración, autoabastecimiento exportación e importación
  • A principios del siglo XXI, la capacidad de generación del sector privado representaba el 11% de la capacidad total del sistema eléctrico nacional
  • En 2009 desaparece la Compañía de Luz y Fuerza del Centro.
    Esto llevó a que CFE participe con el 100% de la capacidad de generación del sector paraestatal.
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Debido a que CFE es la única empresa estatal responsable del servicio público de electricidad, es la segunda compañía más grande del país.

Sus activos representan 850,000 millones pesos y sus ventas de 233,600 millones de pesos.

Estas cifras, posicionan a la CFE como una empresa sólida y de credibilidad.

También ha sido calificada por empresas de riesgo como “grado de inversión” en sus emisiones de deuda.

En 2018, la CFE logró un rendimiento neto de 27 mil 273 millones de pesos.

La anterior cifra se alcanzó como resultado de la venta y el transporte de energía.

Como vemos, la energía eléctrica prácticamente lo es todo y es el motor que permite el funcionamiento de México.

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