Las leyes de selección natural hablan de la sobrevivencia de los más aptos y aunque los tiempos han cambiado, estas premisas siguen vigentes, sobre todo en las finanzas personales.
Aquí hay una lista de las cosas que debes seguir para no quedarte atrás en esta cadena alimenticia.
Aprender de los errores
Todos los cometemos. Por más que nos digan qué sí y qué no hacer, no hay manera que seamos perfectos solamente por escuchar las anécdotas de los demás. Lo que sí podemos hacer, es reconocer en dónde pegamos con pared e idearnos un plan para mejorar.
No tomar las cosas personales
El dinero es un tema delicado, pero cuando se trata del bienestar económico, lo mejor es que las cosas se hablen claras y con transparencia.
No es personal si un empleado renuncia por perseguir una oportunidad que le beneficiará, y tampoco es personal si alguien te cobra el dinero que te prestó y viceversa.
A cada quién le toca ver por su propio bien, porque si ellos no lo hacen, ¿a quién le toca?
Formar un plan de acción
La selección natural, señala que también es necesario saber qué se quiere lograr y cómo crear un plan de ejecución para lograrlo. Visión sin acción no sirve de nada.
Adaptación
Por último, si no somos flexibles, nos rompemos. Saber reconocer cuándo es momento de un cambio es indispensable para no quedarnos atrás y buscar oportunidades.
