¿Qué escoger un fideicomiso universitario o un seguro educativo?

Si eres papá siempre querrás lo mejor para tus hijos, y pensando en su futuro es bueno que te apoyes en un fondo para sus estudios y así puedan ir al mejor colegio o universidad del mundo.

De seguro buscas que tus hijos no padezcan la triste realidad de muchos jóvenes que se quedan sin estudios superiores a causa de escasos recursos.

Te recomendamos que vayas contratando a temprana edad un seguro educativo a largo plazo para garantizar la educación de los pequeños del hogar.

Piensa bien en dónde

Sin embargo, no todas las instituciones que ofrecen este producto son tan eficientes como se esperaría, de hecho, las mejores son las siguientes:

Seguros GNP, Seguros Atlas, Mapfre México, MetLife, HSBC Seguros y Banorte que son los más confiables.

Pero debes de recordar esto, cuando contrates cualquiera de estos seguros deberás estar consciente que se le gravará impuestos a ese dinero, en cambio al fideicomiso no te cobrará impuestos te explicamos.

Por ejemplo, un fideicomiso especializado para la educación debe estar operado por un banco.

En este caso funciona de fiduciario y es el encargado de captar, custodiar, administrar y reinvertir las aportaciones para generar rendimientos del dinero del beneficiario, el cual está destinado exclusivamente para la educación.

Por otro lado, aun cuando los seguros educativos operan mediante una institución financiera, buscan proteger a la gente ante accidentes.

En algunos casos, también abren un espacio de dote que genera un ahorro que se pagará cuando el niño llegue a la universidad.

¿Seguro o fideicomiso educativo?

Para ayudarte a tomar una decisión, es necesario que conozcas las diferencias entre un fideicomiso educativo y un seguro educativo. Analiza cuál de las dos opciones es más conveniente para ti y tu familia:

• Un fideicomiso es un fondo de ahorro dinero donde la suma queda exenta de impuesto sobre la renta y se reinvierte constantemente hasta que se necesita el dinero.
• Un seguro educativo se ahorra hasta que el hijo tiene 18 años y se puede usar los fondos para ir a la universidad, aquí sí se le cargan impuestos al dinero y el rendimiento puede ser menor.

Pase lo que pase busca respaldarte por una institución confiable, para que no te lleves sorpresas desagradables.

Ten en cuenta lo siguiente

De acuerdo con el Buró de Entidades Financieras de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), estos deben de ser los criterios a considerar a la hora de consultar un seguro educativo:

• Contrata a edades tempranas, ya que entre más pequeño sea, el seguro será más barato.
• No omitir ni mentir respecto de la información que se proporciona a la aseguradora al momento del llenado de la solicitud, ya que puede ser motivo de que se rescinda el contrato.
• Tomar en cuenta que el pago del seguro será de mediano y largo plazo para que tenga el efecto deseado.
• Comparar el costo y los beneficios que te ofrecen, no tomar por definitivo la primera opción que conozcas.
• Contratar sólo con agentes que cuenten con cédula expedida por la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF) para realizar esta actividad.
• Hay que considerar que si eliges forma de pago mensual, trimestral o semestral te pueden aplicar un cargo extra.
• Considera contratar la cobertura denominada exención de pago de primas, la cual tiene la finalidad que, en caso de fallecimiento o invalidez total y permanente de los padres o tutor, automáticamente quede pagado el seguro y el hijo reciba la suma asegurada al cumplir la edad pactada en el contrato.

Nosotros te recomendamos que valores ambas propuestas y que revises con un ejecutivo de cuentas la mejor opción para ti.