10 mandamientos para la convivencia con roomies

10 mandamientos para la convivencia con roomies

Es difícil vivir con gente ajena a tu familia. Cuando vives con roomies las rutinas son distintas, las costumbres chocan y lo que le parece normal a alguien puede ser completamente ilógico para otro.

Por estas razones, es indispensable hacer una especie de contrato o acuerdo para facilitar la convivencia en paz dentro del hogar y contemplar los siguientes términos:

1. Limpieza

Este es un buen punto por el cual empezar, ya que implica el espacio físico donde van a estar viviendo.

Decidan si contratarán a alguien que hará la limpieza o si quieren dividir las tareas por día de la semana para ahorrarse el gasto. En el segundo caso, sirve tener un pizarrón o calendario con las tareas por realizar cada día para mantener la organización.

Si no están en la misma página en cuanto a limpieza, van a haber problemas. Es necesario que cada quien ponga de su parte y respete las áreas comunes para minimizar los conflictos.

2. Acuerdo de visitas

Las reglas de las visitas cambian mucho de departamento en departamento; algunos son fiesteros y les encanta la compañía, otros son tranquilos y prefieren un ambiente zen.

Si están en desacuerdo, intenten llegar a un punto medio. Por ejemplo, se permiten reuniones los fines de semana y visitas más tranquilas entre semana.

3. Ruido

Esto muchas veces se pasa por alto cuando se habla de límites, pero no deja de ser importante. No querrás estar en finales, tener que dormir para llegar temprano al trabajo o simplemente estar tranquilo y que alguien te prenda la licuadora a las 3 am.

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De igual manera, toma en cuenta que los ruidos que tú hagas pueden molestar a los demás. No se trata de dejar de escuchar música o no prender la secadora cuando la necesites, pero es necesario pensar más allá de ti y hacer las cosas en horas decentes y con moderación.

4. Espacio

Dividir espacios de almacenamiento, como la alacena, el refrigerador o el clóset y baño (si es que son compartidos), es la mejor opción para que estos sean equitativos.

5. Compartir

Esto no es necesario, pero para algunos roomies puede funcionar. Compartir cosas de cocina, limpieza o cosas que son menos costosas compradas en bulto, como el papel de baño, evita que haya doble de todo.

6. Gastos

Es mejor que se dividan equitativamente. De igual manera, es necesario tener claro que algunas personas toman duchas más largas, mientras que otras dejan la luz encendida más tiempo.

No tomes a pecho el que los demás no vivan como tú. Dejen claro que los servicios se pueden utilizar para cumplir con las necesidades distintas, pero claramente sin abusar.

7. Designar tiempos

En caso de que sí haya un abuso de los recursos, es útil establecer días. Si una persona usa la lavadora y la secadora todos los días para limpiar una cantidad mínima de ropa, lleguen a un acuerdo de qué tan a menudo puede utilizar cada quién la lavadora.

8. Quehaceres

Si un roomie no soporta hacer algo, lleguen a un acuerdo. Posiblemente a alguien le da mucho asco lavar los platos, pero a otro no le importa. En ese caso uno puede lavarlos, con la condición de que la otra persona los seque.

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9. Comunicación abierta

Es mucho mejor tener una charla incómoda pero breve, a tener muchos problemas después o no estar a gusto. Vivir con miradas acusadoras y palabras pasivo-agresivas no resuelve nada. Por eso es mejor que la tensión no se acumule y que si algo no está bien, se hable.

10. Ahorrar juntos

Muchos departamentos cooperan para ahorrar dinero en conjunto. Algunos apagan el boiler cuando no se utiliza, compran las cosas que todos necesitan en bulto o se recuerdan que deben apagar las luces cuando no se utilizan.

También se puede establecer un día a la semana en el que cocinan en casa para no gastar fuera, o buscar otra manera de responsabilizarse de sus gastos y apoyarse mutuamente.

Este tipo de comportamiento promueve que cuiden uno del otro, de su hogar y de su cartera.

Es una lista extensa, pero no son reglas complicadas. En su mayoría se pueden deducir por lógica y modales. Lo único que se requiere es ser consciente y no hacer cosas que no te gustaría  que te hicieran a ti.

Así como tú buscas sentirte a gusto en tu casa, los demás también; entonces no dejen las cosas en áreas grises y busquen la manera en que tu y tus roomies puedan vivir mejor.

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