Se acaba de presentar el Plan Nacional de Desarrollo 2019 – 2024, una descripción de los objetivos de la actual administración para los siguientes seis años y la estrategia que aplicará para resolver los problemas y necesidades más importantes del país. Y más allá de los buenos deseos para este tiempo, vamos a analizar un poco lo que dice.
El plan es tan relevante que incluso es un mandato constitucional que al final del sexenio debería ser la mejor manera de calificar la eficiencia y resultados del gobierno.
Un objetivo general
Todas las decisiones del gobierno tienen un impacto directo en la población y por eso saber cuál es el futuro que anticipa es crucial porque puede servir de guía para tomar decisiones laborales, escolares, de finanzas personales e incluso de vida.
Sin embargo, anticipar o predecir es todo un arte porque el grado de incertidumbre es alto y además hay muchas otras variables, como lo que puede suceder fuera del país, que no están bajo control.
Muchas promesas
A lo largo de la historia es evidente que ningún plan de desarrollo del gobierno en turno ha logrado sus metas al 100% porque predomina la demagogia y la visión de corto alcance cuando en otras naciones existen proyectos de mediano y largo plazo.
Y aunque en esta ocasión el gobierno anticipa un cambio radical en todos los aspectos, por eso se autonombra como la Cuarta Transformación, su fotografía es tan ideal, anhelada y positiva que es difícil de creer…y también de cumplir.
¿Más crecimiento?
En el plano económico, el más crucial, el Plan Nacional de Desarrollo reiteró el compromiso de crecer en este sexenio a una tasa promedio anual de 4% y finalizar con un avance de 6%.
Este objetivo que dista mucho no sólo de los pronósticos de la Secretaria de Hacienda, de menos de 2% para 2019 y 2020, y de la primera tasa de crecimiento económico del nuevo gobierno que fue negativa con 0.2% cuando se compara con el último trimestre de 2018.
Lista de buenos deseos para 2024
Otros ofrecimientos son erradicar la pobreza extrema; alcanzar en el año 2021 la autosuficiencia en maíz y frijol, y luego en arroz, carne de res, aves y huevos; para 2024 se habrá cesado la emigración de mexicanos al exterior por causas de necesidad laboral, inseguridad y falta de perspectivas.
La delincuencia organizada estará reducida y en retirada; y los índices delictivos como homicidios dolosos, secuestro, robo de vehículos, robo a casa habitación, asalto en las calles y en el transporte público se habrán reducido a la mitad respecto a los actuales.
Difícil de creer el Plan Nacional de Desarrollo
El Plan Nacional de Desarrollo fue recibido en un clima de incertidumbre, criticas y cuestionamientos sobre la falta de detalles de la estrategia y la implementación, pero el aspecto más positivo del documento es demostrar que los ejercicios de planeación son una herramienta útil para gobiernos, empresas y la población.
En lo anterior, están implícitos cambios que incluso pueden ser radicales para lograr cada una de las metas, siempre y cuando se realicen con un apego a la realidad y no sean sólo buenos deseos o frases vacías. Y por eso que 2024 sea el título del articulo sea la mejor manera para iniciar nuestro propio plan de desarrollo.
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Roberto Aguilar
Tengo más de 20 años de experiencia en el periodismo económico y financiero en los medios más importantes de México. Estoy convencido que la mejor manera de sacarle todo el provecho a los servicios financieros y bancarios es conociéndolos, usándolos y cumpliéndoles. Soy Libra y mi perro se llama Elmo.