La renta fija es un instrumento cuyo éxito reside en pagar el mismo interés desde el principio hasta el final, los títulos están garantizados por el emisor pero como todo, es una inversión con riesgo.
Se le llama “fija” por la rentabilidad, es estática desde la emisión del título hasta el vencimiento. Es decir, el emisor garantiza la devolución del capital invertido y una cierta rentabilidad, adquirida en el contrato.
El interés es fijo únicamente si mantiene los títulos hasta el vencimiento, ya que el emisor se ha comprometido a ello. La renta fija es el tipo de inversión contrario a la renta variable (por ejemplo, las acciones), en el que no sabemos qué interés o dividendo nos van a pagar durante el período en que compremos.
Existen dos tipos de renta fija, la renta fija que proviene de deuda pública y la que proviene de deuda privada.
Ahora sí te explicamos qué es la terminología de la renta fija y las partes que la integran:
- Emisor: es la entidad pública o privada que emite la deuda, es decir, los títulos. Es la entidad que pide la deuda.
- Principal o nominal del bono: es la cantidad de dinero que pide prestado el emisor, correspondiente a cada título.
- Cupón: es el tipo de interés que debe pagar el emisor. Se expresa como un porcentaje del principal.
- Fecha de vencimiento: es el momento en el que el emisor debe devolver el dinero, momento en que termina el préstamo.