Todos saben que la época navideña implica una extensa preparación en cuanto a ahorros, anticipación de gastos, etc; sin embargo, pocos tienen un plan de acción para reponerse de este periodo.
Diciembre es por tradición un mes de bastante consumo y aunque muchos reciben su aguinaldo o alguna bonificación, generalmente se termina gastando más de lo que se percibe, por lo que es muy importante tomar determinadas medidas para reestablecer el curso normal de nuestras finanzas tras las fiestas.
Revisar tu crédito
El simple hecho de revisar tu crédito es un buen comienzo, en especial si utilizaste tu plástico con frivolidad.
Esto te ayudará a: 1) asegurarte de que esté correcto y 2) tener un punto de referencia. Una vez que hayas pagado tus deudas, vuelve a revisarlo para confirmar que te encuentres donde quieres estar.
Considera que tener un puntaje de crédito bajo te puede costar en un futuro.
Genera una estrategia para pagar tus deudas
Algunas personas prefieren pagar las más pequeñas primero. Esto te da un sentido de que estás haciendo progreso.
Otros prefieren pagar las deudas con mayor tasa de interés primero para quitar el peor peso de encima de un jalón y evitar generar adeudos adicionales que resulten complicados de eliminar. La eficiencia varía de situación en situación.
No utilices las tarjetas de crédito
Si es absolutamente necesario comprar artículos de gran valor, planea el gasto con la mayor anticipación posible e intenta que éste sea en efectivo.
Utilizando las tarjetas por falta de efectivo es una manera fácil de caer en un espiral de deudas. Es más, si puedes cancelar tarjetas con cuotas anuales elevadas, mejor.
Empieza un presupuesto
Es un momento en el que se sabe que se deben llevar gastos más tranquilos, pero esto no sirve de nada si no sabes en qué gastas, cuánto gastaste y con qué debes comparar los gastos.
Crear un presupuesto te organizará de manera que puedas salir del área de peligro (económicamente) más rápido.