A veces la fuente de sufrimiento es tu vivienda, busca habitar cerca de tu trabajo o escuela para que todo sea más fácil. Aquí te damos algunas sugerencias para cambies tu estilo de vida y puedas ahorrar.
Sigue estos consejos:
Considera mudarte a un vecindario más barato
Sabemos que es una opción difícil de tomar pero a veces es inevitable, sin embargo, mudarte a una colonia más modesta puede lograr que las cuentas cuadren.
– Si de plano no puedes renunciar a la colonia que te gusta busca roomies para sostener el gasto y dividirlo, así podrías ahorrar significativamente.
– Busca frecuentemente en páginas de inmuebles precios de viviendas por el rumbo que te agrada, así puede que encuentres una buena oferta un día de estos.
– Renta la propiedad de un amigo o familiar, regularmente ellos pueden darte un buen precio y sin necesidad de aval.
Negocia con el arrendador tu renta
Si tienes un buen historial de alquiler y eres un buen vecino, es posible que tu arrendador trabaje contigo cuando le digas que el costo del alquiler podría forzarte a mudarte, plantea la posibilidad de absorber ciertos cargos a cambio de que congele la renta.
Ahorra con una casa propia
Una hipoteca puede ser tu gasto mensual enorme, pero es una ventaja a futuro ya que en algún momento será tu patrimonio.
Por ejemplo, compra una propiedad del banco, esas casi siempre son más económicas debido a que han sido embargadas y el banco no quiere tenerlas, así que podría subastarlas a un valor inferior al cotizado en el mercado.
Redefine tu hipoteca
En caso de que lleves años pagándola trata de refinanciar el convenio para que ambas partes salgan beneficiadas ya sea una mejor tasa de interés o algún otro acuerdo para reducir tus costos a largo plazo.
Aísla tu casa o departamento del mal clima
Si tu vivienda está en área de clima extremo quizás estés pagando más de lo que deberías por calefacción o aire acondicionado, por eso te recomendamos aislar correctamente tu casa. Algunos consejos son:
– Colocar cortinas gruesas para conservar el calor dentro de la casa en la noche, sellar los huecos en las ventanas y poner una frazada contra el espacio de aire debajo de una puerta externa puede ayudarte a ahorrar en calefacción.
– Reemplaza calderas, calefactores, electrodomésticos, ventanas, puertas, aislamiento térmico y otras partes de la casa con alternativas ahorradoras de energía. Estas inversiones pueden ser costosas inicialmente, pero valdrán la pena conforme pase el tiempo.
Usa menos electricidad en los electrodomésticos
Nunca dejes las puertas del refrigerador abiertas o hagas funcionar el lavaplatos si no está lleno.
Usa el equipo de lavandería para tandas llenas y no sólo para unas cuantas prendas. Incluso estas medidas pequeñas aumentarán tu ahorro de energía.
Cambia tu fuente de energía
Los paneles solares, los molinos de viento y las ruedas hidráulicas están disponibles para uso personal y están más baratas que nunca. Ya no hay pretextos.
Quédate en casa, hay mucho para entretenerse ahí
Sabemos que hay miles de lugares geniales allá afuera, pero quedarse en casa también tiene su encanto, desarrolla pasatiempos como leer, coleccionar cosas, reparar objetos, prepara recetas, platicar con tu familia, todas esas cosas que a la larga dejan mucho a nivel personal y que se reflejan en lo cotidiano.