No hay mayor satisfacción que saber que algo es tuyo por tu propio mérito y definitivamente así se siente cuando ya te sabes dueño de tu hogar, tu patrimonio.
En algún punto, todos deberíamos aspirar dejar de ser esclavos de rentas mensuales.
Si no es algo que habías contemplado, aquí hay algunas razones por las que deberías establecer esta meta y los beneficios que tiene a largo plazo.
El aumento deja de ser una carga
Se elimina la preocupación por el aumento con cada renovación de contrato. No solamente te brinda seguridad de que no sufrirás de no poder pagar la renta en algún punto, sino que saber que no perderás tu casa en algún momento da seguridad emocional también.
Una vez que se paga, el dinero se puede destinar a otra cosa
Nunca faltan cosas que pagar. Cuando se deja de pagar renta, se puede direccionar el ingreso a otras cosas necesarias, como el súper, los servicios, etc.
Tienes libertad artística
Una vez que seas dueño de tu departamento o casa, puedes hacer con ella lo que te plazca.
Se elimina la obligación de consultar o tener que responder a alguien cuando llega la inspiración o simplemente es justo y necesario remodelar.
De igual manera, vives de acuerdo con tus propias reglas
En todos los otros lugares (trabajo, escuela, etc.), debes seguir una serie de leyes o reglas apropiadas.
Lo último que quieres cuando llegas a tu casa es que alguien te diga como sí y como no vivir. Ser dueño de tu hogar también te da la libertad de ser dueño de cómo vives.
Formas tu patrimonio
No solamente da estabilidad inmediata, sino que también crea quietud económica y emocional para tu familia, siendo algo que pueden heredar y que les brindará seguridad inamovible.