Caer en los malos hábitos al emplear nuestra tarjeta de crédito es sencillo, pero esto nos puede orillar a tener un mal historial, endeudarnos y trastocar nuestra estabilidad financiera.
Es importante considerar las costumbres que se tienen en el manejo de alguna tarjeta de crédito, para poder modificar estos comportamientos.
No leer a detalle los estados de cuenta
Leer a detalle los estados de cuenta puede ser una tarea aburrida y que lleve mucho tiempo en hacerla, sobre todo si se realizan muchas compras o se tiene varias hojas que revisar.
Sin embargo, es beneficioso revisar los estados de cuenta a detalle, pues nos podemos dar cuenta de gastos no reconocidos o errores en los pagos que realizamos.
Realizar compras sin verificar el límite de crédito
Es importante revisar continuamente el crédito que tenemos disponible en nuestra tarjeta de crédito, especialmente si se revisó hace algunos días o semanas.
Existe la posibilidad de que algunas compras se hayan olvidado o que algún pago no se haya aplicado correctamente haciendo que disminuya el crédito disponible.
Esto lo debemos hacer para evitar sobregiros en la tarjeta y con ellos el cobro de intereses o peor aún, la pena de que la tarjeta sea rechazada.
Preferir el uso de tarjeta de crédito en vez de la tarjeta de débito
A menos de que use la tarjeta de crédito para acumular recompensas o que paguemos puntualmente mes con mes, no se debe optar por el uso del crédito sobre el débito.
La tarjeta de débito es el acceso directo a los propios fondos que se deben usar para compras diarias como comida, gas, ropa y otros gastos.
Usar la tarjeta de crédito, debe de ser consciente de que se tiene que pagar lo que el banco está prestando.
Pagar sólo el mínimo
Aunque es más sencillo realizar el pago mínimo que calcular realmente cuánto se puede pagar. Realizar sólo este pago no hace que se avance mucho en la terminación de la totalidad de la deuda con la tarjeta de crédito.
Es importante destinar un poco más de dinero dentro de las posibilidades de cada persona para no pagar demasiados intereses y liquidar la deuda lo más pronto posible.
Pagar tarde la tarjeta de crédito
En la actualidad existen toda una gama de posibilidades para programar el pago de la tarjeta de crédito a tiempo, desde el teléfono celular, aplicaciones, hasta recordatorio de parte del banco.
Si a pesar de todo esto, se paga tarde la tarjeta de crédito, el banco le cobrará intereses altos por pago tardío.
Comprar cosas que no se pueden pagar
Si existen cosas o servicios que se quieren, pero no se necesitan o no se pueden pagar, es mejor adquirirlas hasta que se pueda hacerlo. La satisfacción que da adquirir esas cosas que nuestro bolsillo no nos permite, no nos exime de la deuda que estamos asumiendo.
Antes de realizar una compra es bueno plantearse si podemos pagarla, si no, lo mejor es negarnos a hacer ese gasto para obtener estabilidad financiera en el futuro.
Dejar de usar las tarjetas de crédito
Dejar de usar las tarjetas de crédito en cierta medida es igual a usarlas demasiado, pues si permanecen inactivas durante mucho tiempo pueden no generar historial crediticio, aunque las manejes de buena manera.
Por otro lado, el emisor también puede cancelarla debido a su inactividad. Es bueno utilizarla al menos una vez cada tres o seis meses para mantenerlas activas.
Es importante deshacerse de los malos hábitos que se tienen con las tarjetas de crédito, pues mejorar en ese sentido nos permitirá vivir sin deudas y mantener nuestras finanzas personales sanas.