Se hablan muchas maravillas de la inmobiliaria o bienes raíces como manera sustentable de vivir, pues no aseguran un ingreso más o menos permanente, sobre todo si lo ponemos en renta.
Si piensas invertir aquí, hay algunas cosas que debes saber primero.
¿Qué es?
La inmobiliaria, o bienes raíces, obtiene su nombre debido a que consta de un terreno o derivado que no se puede mover. Puede ser cualquier cosa desde una casa, un departamento, oficinas, estacionamientos, terrenos, edificios, construcciones, etc.
Es un ingreso seguro
Si se es inteligente al respecto, puede formar un ingreso constante de manera mensual. Adicionalmente, la preocupación por la pérdida de dinero disminuye, ya que el valor de la inmobiliaria generalmente aumenta a largo plazo y no fluctúa.
Es una alternativa al ahorro
Si no es la única fuente de ingresos, muchos optan por utilizar esta inversión como “cuenta de ahorros” para la universidad, imprevistos, e incluso la jubilación.
Debes conocer en qué inviertes
De esta manera podrás calcular los riesgos y beneficios de tu inversión. Tener visión es importante, pero tener visión basada en fundamentos es esencial.
Por ejemplo, si quieres comprar un departamento para rentar, elige un lugar donde sabes que la demanda es alta. Es mejor pagar un poco más de golpe, con tal de generar ganancias aseguradas.
Si no conoces tu campo, es fácil verte decepcionado con el fracaso o la falta de ingresos.
Mantente actualizado
Siempre ten en mente que debes cuidar de la propiedad que ofreces. Esto implica mantenimiento y remodelación. Si el espacio en el que inviertes se queda atrás en algo, será menos codiciado.
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