Como padres siempre deseamos lo mejor para nuestros hijos. Pero que tal si pudiéramos invertir en nuestros niños desde sus concepción. Es decir, color de ojos, pelo, estatura y todo aquello que los hiciera sobresalientes en su sociedad inmediata. Pero, ¿Sería ético o no?. Te contamos.

Actualmente vivimos una de las épocas más prosperas en materia de diseño y tecnología en todas las áreas. Siendo posible acercarnos a lo impensable. Una de esas opciones es la escultura genética de nuestros hijos. Que de ser realidad podría cambiar el rumbo de la humanidad y las estratificación social.

Desde hace años se viene hablando de esta posibilidad en los grandes congresos de genetistas y científicos del mundo. Se ha expuesto la interesante idea de la “personalización” de tus hijos. Es decir, que saquen los mejores rasgos disponibles de ambas familias.

¿La eugenesia reservada únicamente para los más poderosos?

Hasta ahora, casi todas las naciones se oponen a estos temas por temor a causar problemas en la especie humana. Al intervenir en el proceso de concepción durante la gestación de embriones humanos vivos. Si se implementan tales experimentos y sometidos al mercado, las sociedades serían objeto de diferencias. Entre supremacistas y naturales, a partir de la exaltación y selección de rasgos beneficiosos, como la altura o la inteligencia.

La técnica CRISPR (en inglés: Clustered Regularly Interspaced Short Palindromic Repeats) se usaría para modificar el ADN y poder hacer propiamente manipulación genética. Lo cual se asemeja a cortar y pegar caracteres en un documento de Word o editar una foto en Photoshop hablando burdamente. Las intervenciones vía CRISPR bien ajustadas, podrían convertirse en un tratamiento boutique para personas adineradas que buscan una ventaja para los jóvenes del futuro.

Esto podría exacerbar aún más las crecientes tendencias del emparejamiento selectivo. En el que las personas con antecedentes y posiciones similares tienden a casarse entre sí. Impidiendo la movilidad social y claro causando un cuello de botella generacional. Esto haría que se concentrara la riqueza, los estudios y otros beneficios únicamente a miembros de los círculos más altos. Haciendo más ostensible la desigualdad entre las personas.

Sin embargo hay quienes argumentan que el gobierno o los científicos no tienen el derecho de legislar entorno a sus entrañas ya que cómo futuros padres que son buscan las mejores características disponibles para sus hijos al igual que en otros aspectos como son la crianza u otras oportunidades de vida.

¿Es viable?

Si se lleva a la praxis de modo comercial, el costo de la secuenciación de genes en un principio sería alta, pero eventualmente caería rápidamente lo cual podría ser un sueño para muchas parejas quienes no sólo buscan brindarle un futuro mejor a sus hijo sino una apariencia deseable y armónica, lo cual les brindaría ventajas para sobrevivir en sociedad.

Éste diagnóstico, llamado diagnóstico genético de pre-implantación (DGP, por sus siglas en inglés), se practica para ayudar a las parejas a identificar embriones que podrían tener un alto riesgo de enfermedades genéticas importantes como la enfermedad de Tay-Sachs y es de uso preventivo, entonces de apoyarse en ese estudio, también se podría detectar otras cualidades genéticas.

El DGP sigue siendo costoso e impreciso, pero se convertirá en una opción más atractiva a medida que mejore en está u otras áreas. Además, las continuas mejoras en el poder de la computación probablemente ayudarán a los científicos a comprender mejor la compleja interacción de los genes.

Los científicos y los médicos temen que CRISPR pueda afectar inadvertidamente a los genes no relacionados con consecuencias no deseadas. Sin embargo, el DGP no presenta desventajas obvias porque no se produce modificación de la materia genética.  Por el contrario, los padres podrán elegir un embrión con mayorprobabilidad, y según la mejor investigación, de exhibir rasgos deseables. En resumen si es aprobada esta tendencia en el futuro, los niños serán más sanos, más hermosos y listos. Lo cual se traduciría en una vida llena de éxito y afecto. Según libros como Capital Erótico de la Doctora Catherine Hakim.

Aún hay mucho por discutir y  por descubrir pero lo cierto es que de ser llevado a cabo no habríamos visto nada igual antes.